lunes, 7 de enero de 2019

UN AMOR QUE MURIÓ ANTES DE NACER

“Mi cabeza muere del dolor, las lagrimas ruedan sobre mis mejillas, y yo aquí estoy sentada en una esquina de mi cuarto sin que nadie pueda entender que pasa, sin que nadie pueda entender el porque de mi situación.”
Fue lo ultimo que escribió en su blog, era una chica carismática, tierna y muy linda, frente a todos se veía siempre feliz, pero con una tristeza en su mirada que no lograba descifrar, iba a mi escuela, era dos años mayor que yo, siempre la admiraba de lejos desde la primera vez que la vi un día en un parque cerca del colegio, ella estaba al lado de un puente escribiendo en un cuaderno.
Un día pase nuevamente por hay con la esperanza de volverla a ver, la busque con la mirada pero no podía encontrarla hasta que la vi sentada y casi escondida detrás de un árbol me acerque y note que lloraba.
-- Porque lloras estas bien -- le pregunté. 
-- no es nada -- contestó  ella. 
-- quieres un helado de seguro eso te subirá el ánimo -- le dije. 
-- No gracias -- se levantó seco sus lagrimas y se fue.
Quede desconcertado, ¿porque una niña tan hermosa y aparentemente feliz lloraría de esa manera, sola? 
Quise acercarme a ella en el colegio pero cada vez que me veía, me ignoraba y seguía su camino, así que pase nuevamente por el parque lo hice por un mes o quizás un poco más y no la volví a ver.
Empezaba a perder las esperanzas de volver a verla en este parque, pero una tarde saliendo del colegio como siempre pase por hay y allí estaba como la primera vez que la vi hermosa y pensativa, fui a comprar helados y se lo lleve.
-- quieres -- le dije. 
Ella me miró por unos segundos y volvió a mirar a la nada -- otra vez tú por aquí -- dijo finalmente.
-- No aceptaste mi invitación la ultima vez, así que esta vez traje el helado, ya no puedes rechazarlo en la tienda no me devolverán el dinero -- le dije -- ella sonrió y tomo el helado.
Hablamos un rato, nos preguntamos cosas de cada uno con el fin de conocernos mas, reímos un poco nos hicimos amigos, ella me dijo que iba al parque a aclarar sus pensamientos y que por eso siempre estaba allí sola, le pregunté que era lo que escribía en el cuaderno, me dijo que era frases que inventaba para desahogarse, le pedí que me leyera una, miró el cuaderno con tristeza y se negó, dijo que si quería leer algunas de sus poemas los buscara en un blog que ella tenia en Internet, dijo que allí tenia algunos de los poemas que estaban en su cuaderno.
Deje de pasar por el parque hablaba a menudo con ella en lugares diferentes, ya no tenia la necesidad de pasar nuevamente por allí, nos volvimos muy buenos amigos y yo sentía como día a día me enamoraba mas de ella, una tarde decidí pedirle que fuera mi novia, busque mi celular para llamarla pero ella llamó primero. 
-- Hola estaba apunto de llamarte -- le dije. 
-- Necesito hablar contigo-- me dijo. 
-- Yo también necesito hablar contigo necesito decirte algo importante-- le comenté.
Me pidió que nos viéramos en el parque después de clases. Llegue 15 minutos tarde le explique el porque de mi  tardanza pero no pareció importarle
Tenía una notable tristeza en su rostro, en su mirada.
--  pasa algo – le pregunté. 
Permaneció unos minutos en silencio y finalmente me dijo -- tengo que irme.
-- Para donde – le pregunte.
-- Lejos no volverás a verme – me dijo, aun sin mirarme.
-- Pero porque – insistí.
-- No encontré lo que buscaba, estoy cansada y solo quiero olvidarme de todo – dijo tristemente. 
Una lágrima rodó por su mejilla la abrace luego me miró con sus ojos llenos de lágrima y me dijo. 
-- gracias por regalarme los mejores 3 meses de mi vida, ahora solo tengo que irme.
Se marcho corriendo y no la volví a ver, la busque en el colegio pero no volvió, decidí ir a buscarla en su casa, salió su mama tenia los ojos como si hubiera pasado días llorando.
-- Se encuentra Lorena -- le pregunte.
Ella me miró con extrañes y me dijo -- Aun no sabes que paso con ella cierto -- me asuste -- como así le paso algo – pregunté. 
-- eres Camilo -- me pregunto- asentí con mi cabeza, me paso una carta, me dijo que se había suicidado y que dejo una nota donde al final le pedía que me entregara esa carta.
Salí de hay con el corazón roto, fui al parque a leerla, en ella me contaba el porque de la tristeza en sus ojos, porque la encontré aquel día llorando en el parque, me contaba todo. Después de terminar de leer fue inevitable dejar de llorar, cubrí mi cara con mis manos y llore inconsolablemente.
No podía creerlo, no entendía nada, porque nunca me di cuenta de sus verdaderos sentimientos de su tristeza, de su amor por mí, porque nunca me dijo nada, me cuestione muchas veces si pude hacer algo para cambiar este final.
Un día, después de regresar  a casa, prendí el computador y divague en Internet entonces encontré su blog nuevamente, había escrito algo el día que murió fue lo ultimo que escribió antes de irse decía: 
“Mi cabeza muere del dolor, las lagrimas ruedan sobre mis mejillas, y yo aquí estoy sentada en una esquina de mi cuarto sin que nadie pueda entender que pasa, sin que nadie pueda entender el porque de mi situación.”
Busque entre mis cosas un trozo de papel, escribí “lo siento, lo intente pero no puedo seguir así, iré en busca de mi amor eterno" deje la carta encima de mi cama y luego me ahorque.

LIZ

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